Para poder salir con su compra bajo el brazo, los consumidores tuvieron que pasar más de seis horas bajo el sol y esperando que los llamaran por numeritos. Ante este aparente viso de organización, muchos se quejaban del desorden de la actividad porque habían algunos ciudadanos que se colearon, lo que enfureció a los presentes.
El escándalo producido por la viveza del venezolano produjo que en la cola para comprar hicieran acto de presencia funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana (PNB).
Aunque la sardina está mucho más económica que en otros mercados en Caracas. Según los ciudadanos, hasta en Bs 150.000 se puede conseguir el kilo, mientras que en esa feria la despachaban en Bs 10.000.
“Tengo desde las seis de la mañana esperando el camión que llegó a las once de la mañana. Todo bien, solo que las personas no colaboran. Compro aquí porque sabemos que es del gobierno y es bueno, pero me molesta hacer esta cola y el desorden”, contó Carmen Alcántara, una de las últimas de la cola.
Fuente: http://elestimulo.com
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