Maduro ya no sabe en qué palo ahorcarse, y no deja de inventarse conspiraciones, una tras otra, y esta ya es la vigésima primera vez que según él, intentan asesinarlo. Si embargo se le notan las costuras, ya que no sabe explicar cómo es que sus propios militares en pleno desfile, salen corriendo como niñas cuando escuchan la explosión de un drone en el aire.
Tampoco supo explicar cómo es que salieron los videos y fotos de la tortura contra el diputado Juan Requesens, en los que se le ve casi desnudo y con la ropa interior llena de escrementos en la parte frontal y trasera, en diferentes puntos, y ahora se inventa que es que el diputado se puso nervioso y no llegó a tiempo al baño. Además inventó que fueron los propios familiares los que le tomaron las fotos y videos mientras estaba en un examen médico, cosa que es totalmente falsa.
La novela de Maduro con los drones ya ni siquiera ha sido tomada en cuenta por los medios internacionales, ya que en todo el mundo se duda de la credibilidad de este asesino que quiere acabar con lo que queda de este país.
Fuente: Donlengua.com
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