El homicidio ocurrió la noche del pasado miércoles, 17 de junio, en el centro poblado San Lorenzo de Putinza. Los criminales acudieron a la tienda de abarrotes de Alejandro Arias Camposano, de quien se ganaron su confianza desde hace más de un año.
La esposa de la víctima contó al programa de ATV Noticias, Al Estilo Juliana, que uno de los sujetos solicitó una gaseosa y cuando el adulto mayor se la iba a dar, arremetieron contra él.
Al sexagenario lo maniataron y asfixiaron al punto de causarle la muerte. La mujer también fue agredida, pero sobrevivió al ataque.
Los jóvenes rebuscaron entre las instalaciones de la casa y la tienda, y encontraron más de S/5.000, de los cuales no dudaron en apropiarse. Tras cometer el crimen, fugaron del lugar.
Permanecieron no habidos durante varios días, pero el 20 de junio los indignados pobladores los capturaron en el distrito de Tauripampa y los entregaron a la Policía. En su poder se encontraron una mochila con el dinero robado y otros objetos de valor.
Durante el interrogatorio en la comisaría de Cañete, los amigos identificados como Johan Vivas y Edwin Antonio Perdomo, de nacionalidad venezolana, confesaron el crimen con total sangre fría.
“Se asfixió hasta donde sé. No sé qué habrá pasado en ese momento”, aseguró uno de ellos. Asimismo, se defendieron afirmando que la víctima les debía S/1.000, sin embargo, la Policía cree que es una coartada.
La familia lamentó que los criminales hayan sido personas cercanas a la víctima. Asimismo, solicitaron a las autoridades dictar una pena ejemplar.
“Nos duele, nos afecta que esos dos le hayan hecho eso después que tanto los apoyaron. Les dieron alojo, alimentos y trabajo para que ahora le hagan eso”, dijo una de las hijas.
El caso se encuentra en manos de la Fiscalía de Yauyos, la cual se pronunciaría en las próximas horas para decidir la situación de los homicidas.
Fuente: La República
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