Los que compran la proteína animal lo hacen de poquito en poquito para tratar de acompañar la pasta o el arroz, pues un kilo de carne puede costar hasta 800 mil bolívares, mientras que el cerdo esta semana se montó en 850 mil bolívares y ni hablar del pollo, pues ahora ronda los 400 mil bolívares, pero eso depende del sitio y la zona donde lo busquen.
Por ejemplo, en la zona del centro de la ciudad se pueden conseguir a esos precios, pero en el este cada kilo de proteína animal puede costar unos 200 mil bolívares más si se trata de carne de primera.
“Los enfriadores están con poca carne porque la gente no viene a comprar como antes”, dijo el carnicero Ernesto González, señalando que han tenido que surtir con queso porque es lo que mayormente está saliendo, en comparación con la carne, el pollo y el cerdo.
“Uno busca lo más económico para poder resolver la comida”, dijo Urimare López, detallando que mucha gente también se acerca a los comercios a comprar para vender en sus bodegas y así poder tener un ingreso adicional.
Los guaros relatan que pueden comprar medio kilo de carne molida porque es lo que más pueden rendir con verduras y vegetales, pero solamente lo adquieren una o dos veces al mes. Los que cobran sueldo mínimo son los que se ven afectados, pues solamente pueden comprar un kilo de pollo al mes, eso sin contar que no les alcanza para acompañarlo con otra cosa.
Esther Camacho, quien es comerciante informal, dice que ella solamente compra carne o pollo una sola vez en una quincena y que tiene que decidir si lleva una o la otra, pero las dos al mismo tiempo no puede y dice que lo hace por sus dos hijos.
Adicional a eso, una mantequilla Mavesa ronda los 470 mil bolívares en supermercados, mientras que la marca Primor se puede conseguir en la mitad de precio y por eso la gente no duda en llevarla, lo mismo sucede con la salsa de tomate y la mayonesa, al igual con las harinas.
Fuente: LA PRENSA DE LARA
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